CARTA AL PRESIDENTE 290808
PRESENTE.
¿Quién le permitió tutearme?
He visto, no por interés personal, por que se cuelan sus anuncios en los cortes comerciales de la televisión o al cambiar de canal, cómo se dirige a mí, a la población en primera persona.
¿Quién le permitió tutearnos? Sus actos no, su gobierno no, su política no. Entonces, ¿qué le da derecho a hablarme así? Jamás, jamás hemos cruzado palabra alguna de frente, menos nos hemos sentado a compartir una deliciosa cerveza fría con botana, eso lo he hecho incontables ocasiones con mis amigos y entre nosotros, sí nos tuteamos, confiamos entre nosotros, hemos vivido cosas buenas y malas juntos, nos hemos reído y hemos discutido el rumbo tan malo que lleva México. Pero con usted, jamás. Usted no es mi amigo. No me hable de tú, no lo acepto.
Se dice usted presidente, fue nombrado por quienes controlaron el proceso. Pero perdió la oportunidad histórica de legitimar su nombramiento, al haber tantas dudas sobre el resultado. Pudo haber demostrado que obtuvo la mayoría de votos, pero desaprovechó el momento que la historia le dio. Por eso es que le llaman ilegítimo, la historia lo conocerá así mientras exista nuestro país.
¿Quién le dijo que era mejor tutearme? Si fue su idea, que mala fue. Si lo asesoraron, que malos son sus asesores. Se les tutea a las personas con quienes existe un vínculo de confianza, de amistad, de aprecio. Y no le tengo confianza, no es mi amigo y no le tengo el mínimo aprecio. No lo desprecio, aún. Pero está haciendo todo lo posible para que eso pase, la manera en que ha subido el costo de mi vida ha sido innoble, la forma en que ha permitido los excesos en su gobierno es de una falta enorme de sensibilidad cuando pudo haber demostrado que con usted, habría mejores oportunidades. Ha cuidado a su antecesor, a gobernadores que son unos pillos, verdaderos delincuentes, se ha aliado con personas de proceder muy sucio, están trabajando con usted y cerca de usted.
Hoy vivimos peor que antes, con menos posibilidades de crecimiento. Y su bandera actual está basada en las migajas que quedan de petróleo, que además no podemos tocar por que no sabemos como. Y su insistencia es impactante, en vez de iniciar el desarrollo de energías distintas, renovables, que generen empleos en un país hambriento de sueldos decentes, solo tiene ojos para que la iniciativa privada participe de ese supuesto gran pastel. Y vaya cosa, importamos mas gasolina que nunca, producimos menos petróleo que antes, dependemos de los demás como jamás ha sido y además, ¿me tutea?
En verdad, está en un camino muy equivocado. Trabaje y deje que los resultados hablen, que ganen la confianza de los mexicanos. La gran inseguridad que hoy vivimos, no ha merecido una reacción igual, del mismo tamaño pero en sentido contrario. Caramba, como se le han escapado los capos de la droga, de sus cárceles, de sus manos, de todos lados. Le ponen mantitas por todos lados. ¿Qué no se da cuenta que son individuos nocivos para nuestra sociedad? Enciérrelos en una isla alejada, que se maten entre ellos, que no quede ninguno. Deposítelos ahí y no pida mas dinero para seguirlos manteniendo. Si no resuelve los problemas de raíz, hágase a un lado, deje paso para alguien que si desee arrancar de raíz todos los males.
Y no me tutee, no somos amigos.
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