EL FEMINARIO. Venus Afrodita

Diosa de la belleza y el amor entre los antiguos griegos y romanos. Nació de la espuma del mar cerca de la isla de Chipre, feudo del barbudo arzobispo Makarios. Fue obligada a contraer matrimonio con Hefesto o Vulcando (dios del fuego y de las fraguas), el más feo y repugnante de los dioses del Olimpo, por lo cual rápidamente le puso los cuernos con Ares, Adonis, Poseidón, Hermes, Anquises y muchos otros dioses y mortales, cuyos nombres no citamos por absoluta falta de espacio como dicen en las crónicas de sociales. Con Makarios desdeluego no tuvo nada que ver. Se le atribuyen como hijos (a Venus Afrodita, no al arzobispo), Eros o Cupido, dios del amor; Hermafrodito, que lo mismo pinchaba que cortaba, y Eneas, héroe de la guerra de Troya. Contra lo que supone el vulgo, la diosa Venus no fue manca. Lo que ocurrió fue que a la estatua que de ella se conserva en el Museo del Louvre, un conserje miope y borrachón le rompió los brazos al sacudirle el polvo. MARCO A. ALMAZÁN

Y para deleite de todos (esa espantosa manía foxiana, absurda y estúpida, de todos y todas aquí no cabe), una aportación fantástica de mi amigo Salazar. Disfrutad mortales y sabed de lo que las féminas son capaces.