viernes, 24 de octubre de 2008

EN EL METNAL 241008

DISCIPLINA. ASPECTOS SOCIALES

Ya hemos analizado los aspectos psicológicos y educativos de la disciplina, de su inculcación y falta de ella, la conveniencia y alguna de sus consecuencias cuando no se desarrolla en etapas tempranas.

Para ésta ocasión, saldremos de las raíces y veremos las consecuencias de la falta de disciplina en casa. Parece obvio pero por lo mismo, no tiene suficiente importancia en muchos hogares en México: NO PUEDES DAR LO QUE NO TIENES. Y los padres que no tienen disciplina, son incapaces de incluírla en la enseñanza como una herramienta formativa. Incluso, se confunde con suma facilidad el concepto de discilina con imposición, ya que al ser mayores, proveedores y generadores de la familia, los padres tienden a dictar tiránicamente sus órdenes, sin análisis previo ni una previsión de sus consecuencias.

Se les permite a los hijos actividades con un control laxo o ninguno, como ver la televisión, usar la computadora o consolas de juego. Esto es igual a ser negligente con el tipo de amistades que tienen nuestros hijos, los lugares que frecuentan o sus actividades. En nuestra sociedad actual (fijarse bien que evité decir moderna), una enorme cantidad de familias encajan a la perfección en éste esquema, lo cual erosiona los fundamentos de cualquier grupo conforme avanzan en edad los hijos. Así, la dirección que toma la mayoría de la población es a pensar en términos individuales, obedeciendo mandatos de los medios masivos y sin reflexionar: la figura de la mujer socialmente aceptada debe ser únicamente delgada, el hombre debe ir al gimnasio y al salón de belleza, los jóvenes deben ser exitosos económicamente al salir de la universidad y terminando la jornada en la oficina, se permite ir al bar.

Pero en la realidad, ¿qué consecuencias puede tener la falta de disciplina? Veámoslo:

En los Centros de Integración Juvenil, se explica que en plena adolescencia, es decir a los 15 años, con toda la crisis propia de la edad, los jóvenes no tienen aún la madurez y el criterio para sortear con sabiduría las dificultades.

Si esa zona de descontrol es combinada con la falta de disciplina y padres poco comprometidos, el resultado puede ser caótico o incluso fatal. “Parte de las características de esta etapa es la rebeldía, la oposición, el llamar la atención y esto los hace más vulnerables, y el otro factor es el familiar”, dice César Ávalos psiquiatra en los CIJ. Es claro que la familia es un elemento protector y la responsable de inculcar los valores a los hijos. Y aunque no exista rechazo directo hacia un joven en la familia, el hecho de dedicarle poco tiempo por cuestiones de trabajo, implica cierto abandono y alejamiento. Si a ello se suma una actitud directa de repudio de alguno de los padres, para el joven es una agresión.

En ésta misma semana, en la ciudad de México se dió a conocer que se pudo evitar una tragedia como las que ya se han vivido en países que irónicamente se etiquetan como más avanzados o desarrollados que el nuestro.

“María”, de 15 años, intentó crear un “club suicida” con compañeras de su preparatoria en Gustavo A. Madero que, como ella, fueran rechazadas por sus padres.

“Para chavas que tengan problemas y que sientan que todo estaría mejor sin ellas”, indicaba la invitación para formar parte del grupo.

La idea no fue una ocurrencia de “María”, sino que se la dieron unos “amigos” que conoció por internet, pero su plan fue descubierto y detenido a tiempo. María repartió entre sus compañeras un sobre cerrado con las siglas CDS (club del suicidio), en el que había una invitación con un lema “La muerte no es la mejor solución, pero puedes ayudar dando un problema menos”. El club se reuniría los martes, y las chicas recibirían un frasco con 20 pastillas y una navaja para cortarse las venas.

Una de las chicas no estuvo de acuerdo y lo comentó con su madre quien lo denunció a autoridades escolares, desafortunadamente no pudieron conseguir resultados positivos hasta que se hizo la denuncia formal. Las autoridades judiciales consiguieron detener el asunto antes de que se consumara.

Este caso es conocido por las autoridades capitalinas como “el club del suicidio”, y aunque sucedió durante los primeros meses del año, apenas fue dado a conocer públicamente.

¿Y por qué "María" orquestó ésto? Se entrevistaron a las 10 alumnas y a cuatro maestras, tras lo cual se conoció que “María” tenía problemas de autoestima porque su madre la rechazaba por tener sobrepeso.

Hasta ese punto llega la inconciencia familiar y se relaciona directamente con la falta de disciplina.

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