EN EL METNAL. Paíssss al aguaaaa...2

No pasa alguna semana sin que nos enteremos que se dió una noticia peor que en la semana anterior. Y si, el país hace agua, se hunde, se va al fondo.

Pero, ¿qué ha hecho mal México?

Son dos los aspectos fundamentales que han derivado hasta éste momento, dos hechos fundamentales que nos llevan a pique:
1.- Lo que México ha hecho mal
2.- Lo que México ha dejado de hacer.

En lo primero, es muy claro que los ciudadanos no confiamos en ninguna de las instituciones, si hubiese médicos para países, en el nuestro nos dirían que agoniza, pues padecemos un cuadro agudo de extremo desencanto, enojo, apatía, desconfianza y lo peor, deseperanza. La separación entre burócratas y ciudadanos es tan grave que nadie considera que haya habido instituciones que respondan adecuadamente a las necesidades y expectativas de la población. Los pobladores, reconocemos que el gobierno se centra exclusivamente en satisfacer sus propias necesidades de manera cada vez más aislada. Hasta el sector empresarial que siempre se benefició del gobierno, ahora le hace fuertes reclamos.

Pero por otro lado, vemos a un gobierno sin reacción, falto de previsión, de imaginación y de liderazgo. Uno de los más claros ejemplos está en la educación, pues además de que sus planes de estudio ya no le muestran a las nuevas generaciones como conducirse apropiadamente en sociedad, acelerando la descomposición social; la inversión en nuevos científicos es patética, la inversión estratégica está contraída alarmantemente y ahora las naciones del cono sur rebasan a México fácilmente cuando antes era el líder de la zona. Se le reventó el motor a éste país, donde un ejemplo muy ilustrativo es la inversión en salud, ahora es menor a lo que presentan Chile, Brasil o Argentina.

Y en energía, nuestros paladines de la política, se quedan mirando como bajan dramáticamente las reservas de petróleo, mientras las demás naciones latinoamericanas buscan la producción de combustibles con base en el alcohol, energías solar, eólica, maremotríz y muchas más. México en pocos años será importador de esos tipos de electricidad y combustibles cuando tuvo todo excepto un buen gobierno.

Y ahora, ¿qué hacer? Eso, no es tan complicado de saber, como el quien lo podrá hacer. En éste caso, no hay chapulín que nos ayude...