EL FEMINARIO. Josefina de Beauharnais

1763-1814. Emperatriz de Francia, nacida en la antillana isla de la Martinica. Su nombre de soltera fue el de María Josefina Rosa Tascher de la Pagerie, pero le daba tanta pereza pronunciarlo completo, que se casó con el vizconde de Beauharnais para ser simplemente "la vizcondesa". De haber vivido en nuestra época, hubiera querido ser simplemente María. El vizconde perdió dos veces la cabeza: una por ella y otra en la guillotina, por lo cual la bella criolla no tuvo inconveniente en volver a casarse, esta vez con Napoleón Bonaparte. El corso, sin embargo, se divorció de ella porque a la niña le daba flojera tener un hijo. (Napoleón se casó después con María Luisa, archiduquesa de Austria, que si le dió uno, aunque bastante pachucho). Josefina, como buena hija del trópico, fue una mujer sumamente indolente y apática, a la que todo le daba pereza. Tanto así que nunca le pegó los botones a la guerrera de su marido, razón por la cual Napoleón se acostumbró a andar con una mano metida en el intersticio. MARCO A. ALMAZÁN.