DE LA CAVA DEL PATRÓN. México 70.

Monedas de la época, a Lucas le encantaban las de 20 centavos.

Una mañana en que Lucas no tuvo clases, fué sorprendido por su padre, el recio Ing. Saint Martin quien le ordenó acompañarlo al banco. Ignorando los motivos que habrá llevado a su Padre a tal evento único, el niño de 10 años prefirió no averiguar más y acompañarlo, pues se arriesgaba a un regaño o peor aún, a un cinturonazo.

Así que montados en el VW verde, partieron hacia la sucursal más cercana del Banco Nacional de México, donde el imberbe se vió forzado a abrir sus ojitos al tamaño de platones: estaban recogiendo los boletos para acudir al estadio Azteca a ver los partidos de LA COPA JULES RIMET DE FUTBOL, ¡la copa del mundo!

Calendario del recio Ing. Saint-Martin.

Claro que Lucas supuso que su Padre acudiría con sus amigotes, pero quedó apabullado cuando le fué informado que estaría junto a él durante los juegos.

¡Ah, bárbaro! La oportunidad de toda una vida, estar en la inauguración, los juegos de la selección mexicana, octavos, cuartos, semifinales y la gran final.

Desde ese día, el chamaco durmió inquieto, contando los días en reversa hasta encontrarse la mañana del 31 de mayo de 1970 sentado a las 12:00 horas junto a su padre, enmedio de una fiesta de 107,160 personas y atestiguada por todo el planeta vía satélite. Los desfiles, aplausos, música, bailes y el juego inaugural entre la Unión Soviética y el anfitrión, con un 0-0 arbitrado por Kurt Tschenscher(Alemania).

Ese fué el inicio de un período sumamente emocionante, cuando Lucas bebió futbol, comió futbol, soñó futbol y no habló de otra cosa que futbol. Sus padres se miraban constantemente pensando si habían hecho bien en llevarlo al estadio. Pero ya no había otro camino más que seguir.

El rechoncho y mofletudo Juanito 70.

EL MUNDIAL DE FUTBOL MÉXICO 1970. Con su personaje humano Juanito 70, la mascota PICO una aguilita caricaturizada, la invasión extranjera a las distintas sedes y unas vacaciones inolvidables.

Pico, la mascota de México 70