viernes, 17 de diciembre de 2010

EN EL METNAL.Indecencia

Mi amiga del alma Marusa me mandó un correo que me inspiró para escribir ésto. Habla de la INDECENCIA y dado que me movió mucho a escribir, quiero partir con el significado que Real Academia Española de la lengua le da a ese término:

(Del lat. indecentia).
1. f. Falta de decencia o de modestia.
2. f. Dicho o hecho vituperable o vergonzoso.

El correo aprovecha la segunda definición para desarrollar el asunto que ha traído tanta vergüenza a nuestro país. Así que arranquemos con la diferencia tan obsena que existe entre los ingresos de la mayoría de los trabajadores y de los desgraciados que se incrustan en los gobiernos a fin de enriquecerse con el dinero de todos, con la riqueza nacional.

Hace mención el correo sobre el salario mínimo de $54.00 (fijado por el gobierno federal como la cantidad mínima a pagar a un asalariado) diarios, es decir $1,620.00 pesos al mes. Los diputados perciben seis veces esa cantidad pero diariamente, pues se embolsan $6,666.67 asistan o no a su deber, lo cumplan o no. Mensualmente se meten a la bolsa $200,000.00 lo que indica que 123 trabajadores perciben en conjunto eso.


Pero además de esas gigantescas cantidades muchas veces superiores a lo que reciben sus pares en países avanzados, los políticos en el gobierno obligan a la administración pública a pagarles vehículos, viviendas, escuelas para sus hijos, transportación aérea, comidas, comunicaciones, computadoras, hasta seguros médicos y lo más vergonzoso, los exime del pago de impuesto sobre la renta.

Cuando nuestro país se desmorona a pasos agigantados entre la ineficiencia burorática, la inseguridad, la violencia, el narcotráfico y los abusos de empresarios y sus socios en el gobierno, vemos que se aumentan cantidades exorbitantes en sus salarios en vez de cumplir con la obligación de desarrollar al país.

Eso, mis queridos compatriotas además de ser groseramente indecente, es carecer de moralidad y de progenitora. Falta muy poco para que empecemos a ver que ahora a ellos, el pueblo los empieza a linchar por pillos, pues son los cacos más grandes de ésta nación. Mira que meterse esas cantidades por no cumplir su obligación, es cosa muy seria: la nación se los habrá de demandar.

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