EN EL METNAL. Quemados por Disposición Oficial

Hay cosas que pasan en México que por más que le pienso, no acierto a explicarme.


Durante la semana que termina, alrededor de 60 niños, casi una tercera parte de la Orquesta Sinfónica Infantil y Juvenil de México (OSIM), fueron llevados al hospital con "quemaduras de retina, córnea y lesiones de primero y segundo grados en la piel" –aseguraron los menores– luego de una presentación, fuera de programa, para el titular de la Secretaría de Educación Pública (SEP), Alonso Lujambio, en el patio principal de la dependencia, donde estuvieron expuestos a un sol que caía a plomo y a intensas luces de los reflectores.

Sin que estuviera programada, hicieron una presentación ante el secretario de educación pública que ni por ser parte de una familia imaginó que los niños podían verse afectados por insolación y radiación lumínica. Pero, ¿qué pasó? El concierto para el titular de la SEP se efectuó el pasado sábado entre las 11 y 12 horas. Válgame Dior, ni los futbolistas quieren presentarse en esos horarios pues hasta los mata y eso que a ellos les pagan una millonada.

Tanto los niños afectados como integrantes del equipo de la orquesta señalaron que el responsable directo de los hechos es el director del Sistema Nacional de Fomento Musical (SNFM) y director de la OSIM, Enrique Barrios, por ser quien determinó llevarlos a una presentación que ni siquiera formaba parte del programa, y no tomar las precauciones debidas, como la instalación de un toldo para evitar la exposición al sol. Uno de los maestros de la orquesta simplemente resumió: "los quemaron".

Su participación en la SEP no formaba parte de las actividades oficiales de su 14ª (décima cuarta por favor, no catorceava ni catorce) gira nacional, como se evidenció en su programa impreso,, en el que únicamente se incluye un concierto el viernes 31 de julio a las 20 horas en la Sala Nezahualcóyotl y, otro más, en la sala Blas Galindo del Centro Nacional de las Artes, a las 18 horas, el sábado primero de agosto.

Sin embargo, en entrevista, el director de la OSIM, Enrique Barrios, aseguró, entre otros señalamientos que se contradicen con los testimonios de los niños, que "dentro de la programación de actos teníamos planeada una corta presentación en el patio principal de la SEP". ¿Corta? Más de una hora al rayo del sol. Que tipo tan caradura.

Pero el hecho es que 60 niños fueron a dar al hospital. Y con un decreto, no se devuelve la vida, la vista ni la salud. Caramba, las personas que acceden al poder en México pierden la noción de todo, de todo. Y no aprenden ni con la muerte, de no ser la propia.